El eterno retorno es la idea que expresa el destino del hombre y del mundo. Es el sí que el mundo se dice a sí mismo, es la autoaceptación del mundo, la voluntad reafirmándose y autoafirmándose. Es la expresión cósmica del espíritu dionisíaco.
Según Nietzsche, debemos actuar como si la vida que estamos viviendo se fuera a repetir una y otra vez por siempre. Cada instante que hemos vivido tendremos que volver a vivirlo muchas veces, eternamente.
Siempre se ha dicho que la vida es una línea recta, con su principio y su fin. Según esta idea, la existencia del ser humano no es más que un constante buckle de repeticiones, una eterna espiral. Cuando crees haber conseguido algo, tu vida vuelve al punto de partida. Así fue, y así será por siempre. Cada vez respaldo más esta teoría...
1 comentario:
La espiral nace en un punto y se expande en el espacio en ciclos cada vez mas amplios. Evidentemente puedes tropezar dos veces en la misma piedra, pero eso no va a hacer que deje de tener importancia lo que ya has vivido.
Todo movimiento implica un avance.
Nunca dejamos de crecer.
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